El que persevera alcanza

 

Todos hemos oído hablar del valor del empeño continuado, de la firme decisión y de la perseverancia como medios para lograr un fin o para alcanzar una meta. Desde tiempo atrás la sabiduría popular está de acuerdo en que las personas tenaces suelen lograr sus objetivos, pero la profesora Angela Duckworth, en su plática TED, “Determinación, el poder y la pasión de la perseverancia” nos cuenta el camino que ha recorrido para afirmar con certeza como la determinación influye de manera preponderante en el éxito, en el estudio, en el trabajo y en la vida.

Nos relata que como maestra de matemáticas de 1° de Secundaria muy pronto se dio cuenta de que no siempre eran los alumnos de un alto coeficiente intelectual (IQ) quienes obtenían las mejores calificaciones y sí, en cambio, en varios casos les iba mejor a estudiantes que parecían menos brillantes, siendo que los temas de estudio estaban bien diseñados para todos los alumnos del nivel 7° en Estados Unidos. Fue tanto su deseo de descifrar esa situación aparentemente contradictoria que por un tiempo dejó la docencia, se matriculó en la carrera de psicología y se dedicó a la investigación de todas las variables que influyen en el aprendizaje.

 

Formó parte de un equipo que practicó investigación a grupos de edades diversas. En la academia militar de West Point siempre utilizando las preguntas: ¿Quién tiene éxito en los estudios? y ¿A qué se debe?, realizaron predicciones acerca de quiénes serían los jóvenes que permanecerán o quiénes se darían de baja.

En otros ambientes y con alumnos más jóvenes hicieron predicciones durante concursos de “Spelling” para pronosticar quienes llegaría al final de la contienda y algo similar con maestros adultos que ejercían su labor en barrios pobres y difíciles, procurando adivinar quiénes concluirán el año escolar, y de entre éstos quién sería el más eficiente.

De la misma manera continuaron la investigación con grupos y personas de otras ocupaciones. En todos los casos, al término de la investigación he aquí la conclusión a la que llegaron:

No es la inteligencia social, ni la apariencia física, ni la salud, ni el ingreso familiar, ni el coeficiente intelectual la característica más importante para alcanzar el éxito.

Son la determinación, la pasión y la perseverancia las actitudes que les facilitaron a los triunfadores alcanzar metas a largo plazo.

Como Duckworth se ha vuelto famosa luego de la publicación de estos resultados recibe muchas consultas en las que le preguntan: ¿Cómo desarrollo la determinación en los niños?

¿Cómo mantenerlos motivados a largo plazo? ¿Qué hacer para enseñarles una ética sólida de trabajo? 

Ella, con sinceridad responde: “No lo sé, lo que sí sé es que el talento y la inteligencia no les dan la determinación”.

Estamos en el inicio de un nuevo año, quizás un buen momento para trabajar con determinación en nuevos proyectos, nuevos propósitos o simplemente para preguntarnos cómo podemos lograr algún proyecto que tenemos por ahí pendiente.

¡FELIZ AÑO NUEVO!

María del Carmen Salazar Hernández